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Cuando conocimos a Vero y Nando la lluvia y las nubes cubrían el cielo de Madrid, después, en primavera, el sol empezó a sonreír durante las dos divertidas jornada que pasamos haciendo su videoinvitación (que encontraréis al final del post :D) y por fin, el día de su boda el cielo se pintó de azul, las nubes se fueron y el sol se decidió a brillar con fuerza. Y el calor venía también de los invitados, de su gente, que no dudaron en enfundarse sus esmóquines y sus vestidos para asistir al día en el que Vero y Nando se daban el sí quiero en la Finca San Antonio en Madrid.

Para los preparativos de Vero se dispuso de una de las preciosas habitaciones de la Finca San Antonio. Espacio que ofrece una luz natural generosa y que siempre supone regalo para un fotógrafo de bodas. Vestido de novia de Yolancris colgado, zapatos de Lodi dispuestos y un tocado de flores de cera esperaban mientras Ana de Aparichi Makeup y Mar de Belle Poupée hacían los últimos retoques. En ese preciso momento y no muy lejos de allí, Nando se ajustaba la pajarita, los tirantes y su esmoquin de Juan Moreno para llegar puntualmente a una de las más importantes citas de la vida.

Ya en la ceremonia, hablaron de la sonrisa, la alegría y la positividad de Vero en todas las situaciones. Tuvieron palabras también para el carisma y la desbordante personalidad de la que siempre hace gala Nando. Nosotros no podíamos más que confirmarlo y reafirmarnos en que encontrándonos con ellos  habíamos tenido la suerte de poder ser testigos de un amor verdadero.

Para el reportaje posterior empleamos el invernadero que existe en la parte alta de la finca. ¡Qué rincón! Y es que no siempre se pueden tener unas fotos de boda en un invernadero en Madrid. Allí todo fluyó tal y como esperábamos, con alegría y un gran románticismo, risas, sonrisas y caricias hacían de cada fotografía un perfecto retrato de lo que ellos son. AMOR.

Cóctel amenizado por el sonido en directo de un piano, eso siempre acompaña, fotos de grupo con espartanos y manzanas, y para acabar, antes de entrar al salón donde tendría lugar la cena, una foto de todos los invitados empleando la altura de uno de los balcones. A partir de ahí y con la noche como cómplice de nuevo todo fueron muestras de cariño y alegría hacia esta pareja. Con el frescor de la noche y la media luna como testigo la Finca San Antonio se transforma para ofrecer un nuevo ambiente ahora iluminado por farolas en el que destaca la visión desde el exterior de su salón acristalado.

Fiesta para cerrar la noche después de un primer baile a ritmo de salsa que no dejó indiferente a nadie. Y antes de marcharnos, por qué no, un selfie con los novios que guardaremos como clara muestra de la conexión que sentimos con ellos.

Y ya, ahora, un pequeño resumen de todo lo que se vivió.

Celebración: Finca de San Antonio

Vestido Novia: Yolancris

Zapatos Novia: Lodi

Tocado Novia: El Tocador de La Novia

Pendientes Novia: McKenzie

Traje Novio: Juan Moreno

Maquillaje Ana – Aparichi Makeup Artist

Peluquería Mar – Belle Poupée